Además de los sustos y la decoración siniestra, Halloween se ha convertido en una celebración en la que la buena gastronomía también tiene su lugar. Cada año, miles de familias de todo el mundo deciden elaborar un plato único e inigualable para esta noche tan especial, y eso sin olvidarnos de la típica calabaza.
Entre todas las ideas que puedes sacar a la hora de preparar comida para la noche de Halloween podemos decantarnos por una receta de lo más sencilla: los sándwiches funerarios.
¿Qué son los sándwiches funerarios? Te preguntarás. Pues algo más sencillo de lo que pueda imaginar. Se trata de los sándwiches de toda la vida pero con un aspecto que los hace ideales para esta celebración. Realizarlos es algo muy, pero que muy sencillo, pues su éxito no depende del tipo de sandwich que realicemos, sino en la forma de la que le dotemos y la presentación en el plato.
Una vez que hayamos cocinado el sándwich, cogeremos un cuchillo para cortarlo dándole la forma de una lápida en la que, posteriormente, escribiremos el típico RIP (Descanse en Paz) con tomate, tal y como has podido ver en la imagen. Si se trata de un sandwich dulce podemos hacer lo mismo pero con chocolate, algo que encantará a los más pequeños de la casa.
Además, siempre podemos decorar el plato o acompañarlo de una sangrienta y deliciosa bebida de fresa o de tuno indio, que pueda igualar el color de la propia sangre. Tenebroso cuanto menos, ¿verdad?
Ahora solamente nos queda disfrutar de este original plato y ser el alma de una de las fiestas más famosas del mundo. ¿A qué esperas?